El costo invisible del masking en el autismo

El masking es una estrategia de adaptación muy utilizado en las neurodivergencias, específicamente dentro del trastorno espectro autista (TEA). Aunque esta conducta puede facilitar la sensación de pertenencia o conformidad con el entorno social, a menudo genera un malestar significativo a nivel de salud mental.

Tanto por el aumento de la prevalencia como por la mejora en los mecanismos de detección del TEA en la población general, se considera fundamental visibilizar el fenómeno del masking, comprender sus efectos psicológicos y promover entornos en los que las personas puedan mostrarse sin necesidad de esconder quiénes son.

¿Qué es el masking?

El Trastorno del Espectro Autista (TEA) es una condición del neurodesarrollo que se caracteriza por diferencias en la comunicación, la interacción social y la forma de procesar el entorno. (OMS,2025)

En este contexto surge el masking, que consiste en una estrategia de adaptación social mediante la cual las personas autistas ocultan o camuflan sus características propias. Esto les permite adaptarse a entornos mayoritariamente neurotípicos. Para ello, modifican expresiones, suprimen conductas o controlan rasgos de su personalidad para encajar y ser aceptadas.

El enmascaramiento requiere un esfuerzo psicológico constante y puede incluir controlar movimientos repetitivos, forzar el contacto visual o seguir patrones sociales aprendidos.

Aunque el masking no es exclusivo del TEA y puede observarse en otras neurodivergencias, la evidencia indica que es más frecuente y pronunciado en personas autistas, especialmente en mujeres.

¿Por qué es más común en las mujeres?

Las mujeres autistas suelen ocultar con mayor eficacia sus características y rasgos, en parte debido a presiones culturales que influyen en la forma de ajustarse a normas y roles de género. Comportamientos pasivos, como la timidez, se perciben socialmente como aceptables en mujeres, lo que facilita el camuflaje.

Además, las mujeres dentro del espectro tienden a tener una mayor motivación social que los hombres, lo que las impulsa a imitar comportamientos de sus pares neurotípicos y esforzarse por encajar en las expectativas sociales.

Muchas mujeres autistas también presentan un mayor desarrollo del lenguaje, lo que les permite aplicar estrategias de camuflaje más sofisticadas mediante la observación e imitación de conductas sociales. Incluso ajustan sus intereses y comportamientos repetitivos para que sean percibidos como socialmente aceptables.

Consecuencias psicológicas del masking

Los estudios indican que el esfuerzo constante de camuflar características autistas genera un significativo desgaste físico y mental, impactando directamente en la salud emocional de las personas con TEA. Esta carga sostenida se asocia con mayores niveles de estrés, ansiedad, depresión, baja autoestima y agotamiento emocional, e incluso puede contribuir al aislamiento social y a conductas de riesgo, incluyendo pensamientos suicidas.

Además, en muchos casos el masking puede ocultar la neurodivergencia, llevando a que las dificultades sean interpretadas erróneamente como un cuadro emocional aislado, como depresión o ansiedad, lo que retrasa un diagnóstico correcto. Este esfuerzo sostenido también puede afectar relaciones interpersonales, desempeño académico o laboral y la vida cotidiana, generando un impacto en distintas áreas de la vida.

Si bien no es recomendable autodiagnosticarse, resulta fundamental que las personas que sospechen que podrían estar dentro del espectro autista consulten con profesionales de la salud mental. Un diagnóstico adecuado permite comprender mejor las experiencias relacionadas con el masking y sus consecuencias en la salud mental.

Referencias

Augusto, M. (2021). Efecto del camuflaje en la salud mental de las personas con el trastorno del espectro autista [Trabajo de suficiencia profesional, Universidad de Lima].

Duarte Soto, C. (2025). Sesgo de género en el Trastorno del Espectro Autista. Spirat. Revista Académica De Docencia Y Gestión Universitaria, 3(NE1), e5620. https://doi.org/10.20453/spirat.v3iNE1.562

Morales, A., & Vega, M. (2025). Relación entre el enmascaramiento social y la salud mental en adultos con autismo [Trabajo de suficiencia profesional, Universidad de Lima].

Organización Mundial de la Salud. (2025). Trastornos del espectro autista. https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/autism-spectrum-disorders

Quisnancela, M. (2023). Factores que inciden en el enmascaramiento de síntomas de TDAH y TEA. [tesis de maestría]. Universidad de las Américas, Quito.